Un reciente estudio sugiere que los antioxidantes presentes en estos frutos podrían ayudar a prevenir algunos de los efectos de esta enfermedad neurodegenerativa.
En los últimos años, distintos estudios han relacionado el consumo de arándanos con una reducción del riesgo de padecer ciertas enfermedades cardíacas e incluso de desarrollar cáncer.
Ahora, un estudio llevado a cabo por expertos del Centro Académico de Salud de la Universidad de Cincinnati, en EUA, sugiere que estas sustancias podrían reducir los efectos del alzhéimer y mejorar la calidad de vida de los afectados.
Los efectos beneficiosos de estos frutos podrían deberse a la presencia de unos flavonoides denominados antocianinas, unos pigmentos que les confieren su característico color. De hecho, en modelos animales, su ingesta ocasiona una mejora de la cognición y del sistema inmune.
Se realizó un estudio con 47 personas mayores de 68 años con un cierto grado de discapacidad cognitiva, lo que habitualmente se relaciona con el desarrollo de alzhéimer. A un grupo se le proporcionó un compuesto obtenido a partir de arándanos, equivalente a un tazón de los mismos, durante dieciséis semanas, mientras que a otro se le dio un placebo. Así, observaron que el desempeño cognitivo, la memoria y las funciones cerebrales, en general, mejoraban entre los miembros del primero, algo que no se daba en aquellos a los que se había administrado placebo.
Las pruebas realizadas mediante resonancia magnética funcional probaron, además, que la actividad cerebral aumentaba en el caso de quienes habían ingerido los arándanos.
FUENTE: Muyinteresante